Están lloviendo mariposas mueras
por un otoño de árboles inmenso.
La levedad alcanza cotas imposibles
y la nostalgia adorna el alma de recuerdos.
Todas las memorias se agrupan convergentes
y sopla irreverente por el alma el viento cierzo.
Mas pasará este tiempo dorado de angostura
y pasará la luna frígida de invierno
y en las abiertas colinas de la aurora
para otro sueño
el sol de marzo renacerá de nuevo.
Juan Jose Alcolea